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Los rumores sobre una nueva variante aún más prestacional del Volkswagen Golf se ha convertido en el sueño húmedo de los seguidores de la marca de Wolfsburgo. El prototipo Volkswagen Golf R400 contará una variante de producción cuya mecánica podría dejar intacta la cifra de potencia máxima fijada en 400 CV para así alzarse con el título de el más potente de entre los compactos actuales.
Volkswagen quiere apoderarse del trono del segmento C y para ello ha puesto sus miras en la actual referencia que no es otro que el Mercedes A45 AMG con sus 360 CV. Aspirar a rey entre los hot-hatch no es una misión sencilla, pero el Volkswagen R400 promete una evolución lo suficientemente contundente como para distanciarse del Volkswagen Golf R en dinámica y prestaciones.
400 CV para vencer en un campo de batalla muy reñido
La información, hecha oficial por Car&Driver, alude a Heinz-Jakob Neusser como jefe de I+D de Volkswagen. Neusser habría confirmado los planes de producción de esta variante aún más radical del Volkswagen Golf R sin haber entrado en detalles en tanto a su aspecto final, especificaciones, precio de venta y disponibilidad.
Lo que sí es seguro es que el Volkswagen Golf R400 mantendrá la esencia del concept en lo que a apartado técnico se refiere. La última generación del propulsor 2.0 TSI (familia EA888) se mantendrá exprimido hasta los 400 CV y 450 Nm estando asociado a un cambio de doble embrague DSG con seis relaciones y dejando en manos del sistema de tracción total 4Motion con diferencial central Haldex la misión de hablar de control bajo cualquier circunstancia y superficie.
La potencia específica quedará entonces en la mágica cifra de 200 CV por litro, elevando una vez más el listón para este tipo de variantes prestacionales que hasta la fecha quedaba en manos de Mercedes-AMG con los 360 CV de los motores 45 AMG. La velocidad máxima estará limitada a 280 Km/h, mientras que el 0-100 Km/h caerá en 3,9 segundos – 1 segundo más rápido que el Golf R -.
La llegada del Volkswagen Golf R400 por seguro pondrá manos a la obra a los ingenieros del resto de fabricantes, pudiendo ser el golpe de efecto que necesita Ford para decidirse con el Focus RS, BMW con el M2 o Mercedes para estudiar una variante Black Series del A45 AMG.
Volkswagen Golf R400
Fuente: Car&Driver
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