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Los mejores Papamóviles de la historia
Una personalidad tan particular necesita de vehículos especiales, aquí hacemos una selección de los más emblemáticos.
Estar al frente de una de las iglesias más poderosas y con mayor cantidad de fieles en el mundo no es poca cosa. Antiguamente los papas no viajaban por el globo, sus travesías se reducían a pequeños viajes en carrozas visitando los terrenos de la antigua Romania o sus adyacencias. De a poco esto fué cambiando, y con Juan Pablo II, la iglesia católica llegó a casi todos los rincones del planeta, globalizando su presencia en los medios masivos de comunicación y en visitas que movilizaron a millones de fieles.
Peugeot 504
Cuando Juan Pablo II visitó Francia, saludó a las multitudes reunidas en la ciudad de Lyon a bordo de este Peugeot 504, un querido conocido de los argentinos. Uno de los taxis más populares de nuestro país tuvo un primo europeo que llegó a Papamóvil, adaptado con una cúpula en su parte posterior a la que se accedía mediante escalones desplegables. Actualmente, este 504 se exhibe en el museo de Peugeot en Sochaux, ciudad natal de la marca.
Camión Leyland Motors de 24 toneladas
En 1982 Juan Pablo II visitó las islas de Gran Bretaña a bordo de uno de los Papamóviles más voluminosos de la historia, un camión inglés marca Leyland de 24.000 Kg adaptado para llevar en su parte superior una gran pecera blindada. Cabe recordar que apenas un año antes, el por entonces Sumo Pontífice había recibido un disparo de parte de Mehmet Ali Ağca que casi acaba con su vida, por eso es previsible que los ingleses no pensaran arriesgarse en lo más mínimo. Otro ítem destacable sobre este vehículo es que fue subastado en 2006 por $70.000, algo escaso por ser el camión que más cerca estuvo del cielo.
FIAT Campagnola
Este modesto todoterreno fue el preferido de Carol Wojtyla para sus paseos en el Vaticano y al mismo tiempo el terror de sus guardias de seguridad debido a su ausencia de blindaje. Este temor estaba bien fundamentado, ya que en este vehículo, el Papa sufrió el famoso atentado el 13 de mayo de 1981 en la Plaza San Pedro. A partir de entonces, todos los Papamóviles fueron blindados, aunque en algunas oportunidades volvió a ser usado por Juan Pablo II en la Plaza de San Pedro.
Mercedes-Benz G500
En el 2007, la casa germana le obsequió al entonces Papa Benedicto XVI un Clase G bastante particular, ya que posee una cúpula -no blindada- desmontable. El todoterreno de línea más clásica de Mercedes-Benz posee un motor naftero V8 de 5.5 L que entrega 388 CV a las cuatro ruedas. Cabe destacar que el flamante Papa Francisco utilizó este vehículo aún teniendo a su disposición al más moderno y ultrablindado ML 350, ya que prefirió un vehículo que lo dejara bajarse para saludar a la gente.
Colectivo DINA modificado
En enero de 1999, Juan Pablo II realizó su cuarta visita a México y la marca de vehículos pesados DINA estuvo nuevamente presente para brindarle al Papa su medio de transporte (en 1979 fue un rústico camión recortado el que ofició de Papamóvil). Este colectivo cuenta con una gran ventanilla central y un amplio sillón adaptado. Actualmente se exhibe en la explanada de la Basílica de Nuestra Señora de Guadalupe en la Ciudad de México.
SEAT Panda
Quizá sea uno de los papamóviles más pequeños que hayan existido (sin contar a la "Sedia Gestatoria" básicamente un trono con dos largueros para que Pío VII sea llevado a mano, allá por el año 1800) y sin dudas uno de los que menos ostentación mostró, ya que el SEAT Panda es un modelo bastante popular en España, país que recibió a Juan Pablo II en 1982. Una de las principales características de este vehículo es que no tiene blindaje y cuenta con una agarradera para que el Papa pueda ir de pie a la vista de la multitud.
Lincoln Continental Lehmann-Peterson
Fanáticos de los autos norteamericanos, pónganse contentos que llegó su momento. Cuando Pablo VI visitó Nueva York en 1965, lo hizo con estilo, ya que se trasladó en esta limusina bastante modificada de la afamada marca Lincoln; la misma contaba con un techo recortado, una baranda cromada y un asiento elevado. Pero la historia de este vehículo no se queda aquí, en 1968 también sirvió de Papamóvil durante la visita del Sumo Pontífice a Colombia y además llevó a varios astronautas que dejaron su huella en la historia aeroespacial estadounidense, como los tripulantes del Apollo 8, 11, 13 y 15.
Mercedes-Benz Nürburg 460
En 1930, la casa alemana le donó un Nürburg 460 Pullman Saloon al por entonces Papa Pío XI, quien lo alabó proclamándolo como “una obra maestra de la ingeniería moderna”. Este fue el primer Papamóvil, ya que si bien muchas automotrices regalaban sus vehículos al Vaticano, este Mercedes fué el primero en oficiar como vehículo oficial, aunque Pío XI sólo lo usó para dar paseos por los jardines del Vaticano. Contaba con una carrocería modificada, un trono en la parte trasera central y una talla de San Cristóbal. El vínculo con la marca de la estrella siguió en los años 60 con un 300d Landaulet para Juan XXIII, un 600 Pullman Landaulet, un 300 SEL para Pablo VI hasta llegar a los más recientes Clase G y M.
Citroën C6 Lictoria Sex
Quizá no es el mejor nombre para un Papamóvil, pero “Lictoria Sex” significa “Seis Sargentos” en latín, la cantidad de guardias que por entonces rodeaban al Papa Pío XI. Este modelo de 1930 cuenta con un motor de 6 cilindros de 2.4L que entrega una potencia de 42 CV a 3000 rpm y que lo lleva hasta una impresionante velocidad de 105 Km/h. El Citroën C6 Lictoria Sex contaba con varias decoraciones en oro, una figura del Espíritu Santo incrustado en el techo, un trono, puerta tipo Brévière y una representación de San Cristóbal llevando al Niño Jesús. Con apenas unos 200 Km. en su odómetro, este exquisito ejemplar de la industria francesa se encuentra a la vista de todos los que pueden visitar los Museos Vaticanos.
Mercedes-Benz 300D Landaulet
Este precioso espécimen de la casa germana se consagró Papamóvil en 1960, unos treinta años después del último vehículo proporcionado por Mercedes al Vaticano (recordemos que de 1939 a 1945 la Segunda Guerra Mundial estremeció los cimientos de Europa y las cosas no estaban para regalos). El 300D Landaulet contaba con caja automática, una distancia entre ejes alargada casi en medio metro, un amplio techo desmontable, trono en posición central, radio y aire acondicionado. El por entonces Papa Juan XXIII bendijo en persona su Mercedes-Benz 300D.
fuente: http://ar.noticias.autocosmos.yahoo....de-la-historia
--------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------ELIJAN UNO, yo me quedo con el Lincoln....
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