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Aumentos de hasta el 50% en patentes
A partir de la primera semana de enero de 2012 los contribuyentes bonaerenses tendrán un inesperado “regalo” de Reyes: las boletas del impuesto a las patentes y del inmobiliario llegarán con aumentos de hasta el 50%.
Así está previsto en la reforma fiscal aprobada por la Legislatura provincial. El incremento impactará sobre casi 4 millones de partidas correspondientes a viviendas y terrenos baldíos (urbano) y campos de casi todo el territorio (rural).
Con este ajuste en la recaudación el Gobierno prevé obtener 1.900 millones de pesos extra en el próximo ejercicio. Junto al nuevo Código Fiscal, los legisladores votaron el Presupuesto para el año próximo que contempla gastos por 113 mil millones de pesos y un déficit de 6.600 millones de pesos.
El esquema tributario autoriza una revaluación de los inmuebles para “acercarlo” a los precios del mercado. Esto determinará incrementos en las cuotas que pagan los propietarios. Según explicaron, será mayor el impacto en los countries, barrios privados y zonas residenciales. Allí, el ajuste podrá alcanzar el 50% del total que pagan los dueños de esas casas.
Algunos casos concretos. Para las propiedades valuadas hasta los 64 mil pesos, la cuota subirá 50 pesos anuales; de 65 mil a 200 mil, tendrán que pagar hasta 200 pesos más y las viviendas con valores fiscales superiores a los 200 mil pesos no tendrán tope de aumento en el impuesto.
Los chacareros y productores agropecuarios deberán aportar –en promedio– un 27% por el inmobiliario rural. El porcentaje varía según la zona. Y además, la provincia anunció que habrá excenciones y menores subas en las zonas afectadas por problemas climáticos (sudoeste bonaerense).
En el caso de las patentes (impuesto Automotor) el alza será por una actualización del precio (eso ocurre todos los años) y por la aplicación de un punto más en las alícuotas de los coches valuados en más de 60 mil pesos.
Otro gravamen que tendrá variaciones hacia arriba es ingresos brutos. Afectará algunas actividades: los comercios que vendan bebidas alcohólicas y cigarrillos; las concesionarias de autos y las agencias oficiales de venta de juegos de azar deberán pagar una alícuota más alta. Deberán abonar el 8% del total de la facturación, cuando hasta ahora pagaban el 6%.
Así está previsto en la reforma fiscal aprobada por la Legislatura provincial. El incremento impactará sobre casi 4 millones de partidas correspondientes a viviendas y terrenos baldíos (urbano) y campos de casi todo el territorio (rural).
Con este ajuste en la recaudación el Gobierno prevé obtener 1.900 millones de pesos extra en el próximo ejercicio. Junto al nuevo Código Fiscal, los legisladores votaron el Presupuesto para el año próximo que contempla gastos por 113 mil millones de pesos y un déficit de 6.600 millones de pesos.
El esquema tributario autoriza una revaluación de los inmuebles para “acercarlo” a los precios del mercado. Esto determinará incrementos en las cuotas que pagan los propietarios. Según explicaron, será mayor el impacto en los countries, barrios privados y zonas residenciales. Allí, el ajuste podrá alcanzar el 50% del total que pagan los dueños de esas casas.
Algunos casos concretos. Para las propiedades valuadas hasta los 64 mil pesos, la cuota subirá 50 pesos anuales; de 65 mil a 200 mil, tendrán que pagar hasta 200 pesos más y las viviendas con valores fiscales superiores a los 200 mil pesos no tendrán tope de aumento en el impuesto.
Los chacareros y productores agropecuarios deberán aportar –en promedio– un 27% por el inmobiliario rural. El porcentaje varía según la zona. Y además, la provincia anunció que habrá excenciones y menores subas en las zonas afectadas por problemas climáticos (sudoeste bonaerense).
En el caso de las patentes (impuesto Automotor) el alza será por una actualización del precio (eso ocurre todos los años) y por la aplicación de un punto más en las alícuotas de los coches valuados en más de 60 mil pesos.
Otro gravamen que tendrá variaciones hacia arriba es ingresos brutos. Afectará algunas actividades: los comercios que vendan bebidas alcohólicas y cigarrillos; las concesionarias de autos y las agencias oficiales de venta de juegos de azar deberán pagar una alícuota más alta. Deberán abonar el 8% del total de la facturación, cuando hasta ahora pagaban el 6%.
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